Historias de la Ciencia

La presión a nivel del mar decimos que es de 1 atmósfera. ¿Por qué no la notamos? ¿Qué es eso que vivimos bajo presión?
 
La atmósfera tiene masa, por tanto peso y debido a ello es atraída por la Tierra. Nosotros recibimos ese peso igual que lo haríamos de un elefante. Lo que pasa es que no es un peso debido a un sólido, sino a un fluido y los fluidos reparten la presión en todas direcciones, a derecha e izquierda, arriba y abajo.
 
Nosotros no la sentimos porque el líquido contenido en nuestras células ejerce la misma presión hacia fuera y ambas se compensan. Sin embargo, la presión atmosférica puede variar en dependencia de muchos parámetros. Por ejemplo, cuando cambiamos bruscamente de altura tenemos que tragar saliva para destapar nuestros oídos ya que la trompa de Eustaquio es demasiado estrecha como para compensar rápidamente la diferencia de presión entre el oído interno y externo.
 
No te pienses que en todas partes es igual. En Marte es de unas 0,01 atmósferas y en Venus de unas 90.
 
Parece ser que el descubrimiento de la presión atmosférica fue casual. En 1640 al Gran Duque de Toscana le dio el capricho de poner unos surtidores en la terraza de su palacio. Para ello tenía que hacer subir agua desde los pozos y se dio cuenta que no se podía aspirar agua a más de 10 metros. Así que escribió una carta a nada menos que Galileo para ver si podía hacer algo. Pero no lo solucionó Galileo, sino un discípulo suyo llamado Evangelista Torricelli (1608-1647). Dos años después de la muerte de su maestro, Torricelli fue nombrado profesor de matemáticas de la Academia Florentina. Atendiendo una sugerencia formulada por el propio Galileo, llenó con mercurio un tubo de vidrio de 1,2 m de longitud, lo invirtió sobre un plato y comprobó que el mercurio no se escapaba y quedaba a una altura de 76 cm. Ese es su famoso experimento.
 
En la parte superior de ese tubo quedó el llamado “vacío torriceliano”. Como la presión se reparte por igual, en la parte que estaba bajo el mercurio había 76 cm y en la parte que no había mercurio (y estaba la atmósfera) estaba la presión atmosférica. O sea que el pero de la atmósfera equivale a esos 76 cm de mercurio. Si en vez de mercurio se hubiera puesto agua, la altura hubiera quedado en 10,33 metros. Es por ello que no podemos hacer una bomba que aspire más de 10 metros pues no podemos hacer un vacío superior al torriceliano. Lo que se hace es aspirarlo hasta una altura menor y bombearlo desde allí (no es lo mismo bombear que aspirar, por supuesto).
 
No creáis que Torricelli se limitó a hacer el experimento a nivel del mar sino que observó que la altura del mercurio variaba de un día para otro y que descendía según aumentaba la altura donde hacía el experimento. Bueno, no sé si ahí nació el hombre del tiempo pero si no se estaba gestando. De hecho, nunca llegó a publicar sus conclusiones dado que se entregó de lleno al estudio de la matemática pura. Personajes de la talla de Descartes, Pascal, Huygens, Halley, Leibniz y otros llegaron a la conclusión de que la columna descendía a la mitad a 5000 metros de altura.
 
Torricelli comprobó además que el flujo de un líquido por una abertura es proporcional a la raíz cuadrada de la altura del líquido, este resultado es conocido ahora como el Teorema de Torricelli. Estudió la longitud del arco de un cicloide (curva formada por un punto en el radio de un círculo en movimiento). Hizo uso de los métodos infinitesimales y determinó el punto en el plano de un triángulo tal que la suma de sus distancias de los vértices es la mínima (conocida como el centro isogónico). También estudió la trayectoria de los proyectiles. Su único trabajo publicado (“Opera Geométrica” el año 1644) incluyó importantes notas de esta materia. Fue un experto en la construcción de telescopios. En realidad ganó mucho dinero con esta destreza durante el último periodo de su vida que estuvo en Florencia.
 
Y todo esto en 39 años, que fue la edad de su muerte. Una vida muy agitada, ¿no?
 
Fuentes:
“Contando los eones”, Isaac Asimov
“Cartas a Nuria. Historia de la ciencia”, Ramón Parés
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/t/torricelli.htm